Dónde fue a parar el poeta…

El poeta es un ente anónimo, alguien callado y silencioso que carga con una herida abierta; es también una voz infatigable capaz de hacerse eco y de alcanzar cada rincón de la tierra. El poeta es como un guijarro en el zapato, es un despertar, es luz en esas noches que se ha perdido la esperanza.

El científico en cambio es el dueño de un saber; de un saber, en ocasiones dudoso, que se encuentra atrapado por la especialización y por la urgencia de salvar al mundo. Un mundo cada vez más convulsionado y peligroso.

El poeta tiene la particularidad de anticiparse al dolor porque nadie mejor que él sabe de qué adolecen los hombres, nadie sino él tiene en su cabeza cada uno de los errores que la humanidad ha cometido. A la ciencia en cambio, esto no parece importarle, y en su lugar sale hablarnos de su excelente relación con la tecnología. Ambas responsables de muchos avances, pero también cómplices de las más grandes atrocidades.

Sin embargo, solo un tonto se animaría a negar que la ciencia haya conseguido prolongar la vida, solo un necio podría salir a refutar cada uno de sus avances y sus aciertos; o desmentir, que gracias a ella se haya perdido gran parte de esa tensión absurda, o negar, que el hombre moderno se siente menos culpable. Este hombre moderno que bien podría ser “el último hombre” de Nietzsche, ya que se muestra como un ser individualista, mediocre, conformista, alguien con excesivo apego a su salud y un hedonista extremo; un hombre que solo aspira a una larga y sana  vida aburrida, y cuidada con el objeto de evitar la muerte…”

Lo cierto es que poco o nada tienen en común. La poesía vive en el anonimato y la ciencia sale a vanagloriarse cada vez que encuentra la oportunidad de hacerlo. La primera pasa prácticamente ignorada y la segunda es la más mimada de la fiesta.

Ambas son importantes. Tanto la ciencia como la poesía. Pero el mundo no será un lugar mejor hasta que este saber, testarudo y arrogante, aclamado por la ciencia, no tenga la capacidad de preguntarse: ¿dónde fue a parar el poeta…?

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